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En pintura se estudia el reflejo de los colores ambiente en un determinado objeto, es decir que cualquier cosa refleja los colores de su alrededor además de los reflejos característicos propios. De ahí que una prenda de un determinado color nos favorezca, o no, dependiendo del reflejo de su color mezclado con el tono de nuestra piel y el ambiente donde la luzcamos.


Es comprensible que una persona de una característica determinada se relacione con otras personas de la misma característica en un valor aproximado, es como si se extendiera su medio en el que puede medrar y crecer su característica. Así una persona calma se encontrara a gusto rodeada de otras personas calmas y, sin darse cuenta, elegirá ambientes calmos. Lo mismo les pasará a las otras personas, estableciéndose un nexo bidireccional que se entremezcla y difunde según las cualidades de las otras personas y las nuestras propias.


Otra cosa es que conozcamos otras cualidades de la persona con la que nos relacionamos y que no interesa compartir, pero que a su vez compartirá con otro tipo de personas que no tenga ninguna parte común con nosotros. Aquí, lo de los amigos de mis amigos son mis amigos, valdría, pero concéntricamente cada vez menos.


Invitado


17:09
Viernes
23/04/2010